/ jueves 3 de junio de 2021

Civilidad ciudadana y política

Prácticamente se ha llegado el plazo hacia el próximo domingo 6 de junio en el que en México se desarrollará la denominada “elección intermedia”, misma que dará cause a la conformación de la LXV Legislatura del Congreso de la Unión, 30 parlamentos locales, entre ellos la LXV Legislatura del Congreso del Estado de Hidalgo, 15 gubernaturas y 1,900 ayuntamientos, encontrándose para los hidalguenses, a celebrarse las elecciones municipales extraordinarias en Acaxochitlán e Ixmiquilpan.

La noche de ayer miércoles concluyeron los plazos legales en materia electoral para el proselitismo de partidos políticos y sus candidatas y candidatos. Fueron ampliamente difundidas las propuestas de campaña tendientes a consolidar la confianza ciudadana que les permitan ocupar cada uno de los puestos de elección popular sujetos de competencia electoral.

Estos comicios de medio término, considerados así ya que se sitúan dentro de los primeros 3 años de gobierno del Jefe del Ejecutivo Federal, han tenido una serie de matices y condicionantes que sobre todo en los recientes procesos electorales no se habían presentado abiertamente. Así es como, la integración de novedosas alianzas electorales, la postulación de polémicas candidaturas que fueron impugnadas ante el Instituto Nacional Electoral y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, el claro intervencionismo de autoridades federales en diversas regiones del país, el amago del presidente de la República de deja ver una posible ampliación de su mandato presidencial constitucionalmente conferido hasta el 2024, la sí ampliación del período de la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por dos años más, el impacto directo de la violencia en la ejecución de abanderados en Guanajuato y Sonora, los secuestros de dos candidatas a alcaldesas en Guerrero y el Estado de México, el uso faccioso de la Fiscalía General de la República para aperturar carpetas de investigación sobre opositores políticos, las utilizaciones de programas asistenciales de naturaleza federal para la compra del voto, la manipulación de los semáforos sanitarios desde el gobierno de la República en estos días aún persistentes de pandemia, hasta llegar al extremo a todas luces comprobable del incremento en la aplicación de las dosis de vacunación contra el COVID-19, estrategia coordinada también desde la federación a tan sólo unos días del “Día D”.

Frente a esta compleja coyuntura que antecederá a la elección que dará inicio en aproximadamente 72 horas debe surgir invariablemente la civilidad ciudadana y sobre todo la civilidad política para tomar parte de lo que todas y todos por ya muchos años hemos adoptado como la “fiesta de democracia”. El exhorto entonces es que acudamos activamente a ejercer nuestro sufragio efectivo por toda aquella oferta política que responda a nuestros deseos respecto al futuro de nuestro municipio, distrito, entidad federativa y por supuesto sobre el país.

Hago de este espacio el idóneo para recordar a la sociedad que, en términos de ley, los notarios públicos de la república mexicana estaremos actuando a petición de la ciudadanía, partidos políticos, candidatos y de las autoridades electorales federales y estatales a lo largo del desarrollo de la elección dominical. En el notariado mexicano e hidalguense estamos listos para que nuestros despachos notariales en cada distrito judicial se encuentren abiertos para dotar de fe pública a todo aquel solicitante que acredite fielmente el interés para que se origine una actuación notarial relativa a los comicios.

Finalmente, es imprescindible destacar y rememorar que el próximo lunes, sea cual sea cada resultado electoral, las y los hidalguenses, las mexicanas y los mexicanos, seguiremos convergiendo en torno a nuestro Estado y la nación. Cuidemos la elección desde la sociedad civil y cuidemos nuestros consensos locales y nacionales que todas y todos sabemos que son más que cualquier disenso o confronta. Que así sea, no dejemos de votar en libertad y sobre todo en responsabilidad ciudadana.

Prácticamente se ha llegado el plazo hacia el próximo domingo 6 de junio en el que en México se desarrollará la denominada “elección intermedia”, misma que dará cause a la conformación de la LXV Legislatura del Congreso de la Unión, 30 parlamentos locales, entre ellos la LXV Legislatura del Congreso del Estado de Hidalgo, 15 gubernaturas y 1,900 ayuntamientos, encontrándose para los hidalguenses, a celebrarse las elecciones municipales extraordinarias en Acaxochitlán e Ixmiquilpan.

La noche de ayer miércoles concluyeron los plazos legales en materia electoral para el proselitismo de partidos políticos y sus candidatas y candidatos. Fueron ampliamente difundidas las propuestas de campaña tendientes a consolidar la confianza ciudadana que les permitan ocupar cada uno de los puestos de elección popular sujetos de competencia electoral.

Estos comicios de medio término, considerados así ya que se sitúan dentro de los primeros 3 años de gobierno del Jefe del Ejecutivo Federal, han tenido una serie de matices y condicionantes que sobre todo en los recientes procesos electorales no se habían presentado abiertamente. Así es como, la integración de novedosas alianzas electorales, la postulación de polémicas candidaturas que fueron impugnadas ante el Instituto Nacional Electoral y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, el claro intervencionismo de autoridades federales en diversas regiones del país, el amago del presidente de la República de deja ver una posible ampliación de su mandato presidencial constitucionalmente conferido hasta el 2024, la sí ampliación del período de la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por dos años más, el impacto directo de la violencia en la ejecución de abanderados en Guanajuato y Sonora, los secuestros de dos candidatas a alcaldesas en Guerrero y el Estado de México, el uso faccioso de la Fiscalía General de la República para aperturar carpetas de investigación sobre opositores políticos, las utilizaciones de programas asistenciales de naturaleza federal para la compra del voto, la manipulación de los semáforos sanitarios desde el gobierno de la República en estos días aún persistentes de pandemia, hasta llegar al extremo a todas luces comprobable del incremento en la aplicación de las dosis de vacunación contra el COVID-19, estrategia coordinada también desde la federación a tan sólo unos días del “Día D”.

Frente a esta compleja coyuntura que antecederá a la elección que dará inicio en aproximadamente 72 horas debe surgir invariablemente la civilidad ciudadana y sobre todo la civilidad política para tomar parte de lo que todas y todos por ya muchos años hemos adoptado como la “fiesta de democracia”. El exhorto entonces es que acudamos activamente a ejercer nuestro sufragio efectivo por toda aquella oferta política que responda a nuestros deseos respecto al futuro de nuestro municipio, distrito, entidad federativa y por supuesto sobre el país.

Hago de este espacio el idóneo para recordar a la sociedad que, en términos de ley, los notarios públicos de la república mexicana estaremos actuando a petición de la ciudadanía, partidos políticos, candidatos y de las autoridades electorales federales y estatales a lo largo del desarrollo de la elección dominical. En el notariado mexicano e hidalguense estamos listos para que nuestros despachos notariales en cada distrito judicial se encuentren abiertos para dotar de fe pública a todo aquel solicitante que acredite fielmente el interés para que se origine una actuación notarial relativa a los comicios.

Finalmente, es imprescindible destacar y rememorar que el próximo lunes, sea cual sea cada resultado electoral, las y los hidalguenses, las mexicanas y los mexicanos, seguiremos convergiendo en torno a nuestro Estado y la nación. Cuidemos la elección desde la sociedad civil y cuidemos nuestros consensos locales y nacionales que todas y todos sabemos que son más que cualquier disenso o confronta. Que así sea, no dejemos de votar en libertad y sobre todo en responsabilidad ciudadana.