/ miércoles 7 de febrero de 2024

Claudia Sheinbaum Pardo la ruta a la consolidación de la Transformación  

En los próximos días habrán de dar inicio las campañas electorales, tanto federales como locales, en las cuales renovaremos en el Estado de Hidalgo desde los 84 Ayuntamientos, el Congreso Local y participaremos en la renovación del Congreso de la Unión y la elección por la Presidencia de la República; en este contexto deseo invitarles a hacer una profunda reflexión sobre los principales cambios y transformaciones vividas en nuestro país y en nuestro Estado con el inicio y puesta en marcha de la denominada Cuarta Transformación de la vida pública de México; en primera instancia, expreso mi profundo respeto a lo que usted estimada y estimado lector puedan pensar sobre el balance y análisis de lo que ha sido este sexenio que está a punto de concluir; lo que sí resulta innegable es que no hace muchos años parecía imposible un cambio de rumbo en cuanto a los gobiernos tecnócratas y la aplicación de sus políticas, y resultaba impensable un gobierno emergido de la izquierda, que inicia un cambio profundo en la vida pública de nuestro país.

Pero ¿cuál fue la esencia de la transformación? sin duda alguna, por primera vez en muchas décadas, poner en el centro de las decisiones públicas a los marginados, a los excluidos, a las masas, a los sectores populares; en síntesis, al pueblo bueno, desesperado y agraviado por la imposibilidad de recibir el mínimo apoyo para salir de sus circunstancias adversas.

Ante esta situación Claudia Sheinbaum como Coordinadora de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación en el país y virtual candidata a la Presidencia de la República, goza de la confianza de los integrantes del Movimiento y del respaldo popular, consecuencia de una amplia trayectoria y experiencia política que la ha llevado a gobernar una de las ciudades más grandes e importantes del mundo; sin embargo, son múltiples los retos que tiene por delante, como el de dar continuidad a un gobierno de izquierda en el que coexisten grupos democráticos progresistas, corrientes socialdemócratas, integrantes de lo que se ha denominado la izquierda tradicional y un número muy importante de incorporaciones de diferentes movimientos populares y de partidos políticos que se han sumado al Movimiento de la Cuarta Transformación.

El gran reto que enfrenta Claudia Sheinbaum es sostener y reafirmar la aportación más importante que ha tenido el obradorismo a la sociedad contemporánea, el cual ha sido el cambio de paradigma de gobernar en favor de las mayorías para revertir las profundas desigualdades que coexisten en nuestro país; son muchas las expectativas que se tienen para este próximo sexenio manteniendo esta premisa, gobernar pensando y decidiendo en favor de los sectores más desprotegidos y manteniendo la convicción de un gobierno de izquierda moderna

¿Qué implica un gobierno de izquierda para los próximos años? implica una gestión que vaya por afianzar y ampliar los derechos humanos e incluya las agendas de grupos progresistas como el feminismo; aunado de garantizar el pleno ejercicio de las libertades que permita una amplia discusión cultural e intelectual sobre las realidades y los grandes retos presentes y futuros de nuestro país; dialogando y atendiendo necesidades inaplazables como lo son las grandes problemáticas que están generando crisis como es el tema del medio ambiente, y afianzando una relación de autonomía pero también de confianza entre el poder económico y el poder político, sin dejar de garantizar el respeto entre poderes; en síntesis, que lograremos consolidar un gran proyecto de gobierno para la consolidación de la Cuarta Transformación que tiene en el centro ampliar los programas sociales, dotándolos de universalidad y constituyéndolos como derechos.

Todo lo que está en juego en la próxima elección está fuertemente vinculado con lo que el Presidente de la República ha denominado el Plan C, el cual es una invitación a todo el electorado del país para que apoye y respalde la Cuarta Transformación para que logre una mayoría calificada en el Congreso de la Unión, y con ello dar paso a las reformas profundas que requiere el país en materia político- electoral, económica, de salud, del propio Poder Judicial para poder transitar de un modelo corrupto y caduco, a una instancia garante de la justicia como una de las deudas históricas más grandes que tiene México.

Consolidar la mayoría en el Congreso de la Unión, en los congresos locales, en los ayuntamientos y en los diferentes espacios de poder en todo México, exigirá de un profundo análisis de los líderes del movimiento, de los partidos políticos que lo integran, de las diferentes corrientes y sectores sociales que participan, a efecto de integrar candidaturas que gocen del respaldo de las bases populares del propio Movimiento de la Cuarta Transformación; quien caiga en la tentación y el oportunismo de querer convertir espacios o zona geográficas del país en parcelas de poder personal, pone en grave riesgo el proyecto transformador y las grandes tareas que tenemos pendientes por resolver las y los mexicanos.

Reitero mi llamado respetuoso a la unidad, no como la anquilosada disciplina partidista del pasado que no discute y no cuestiona; sino como la posibilidad de construcción de un diálogo entre las diferentes fuerzas y representaciones de quienes estamos dentro del Movimiento de la Cuarta Transformación, todos cabemos y tenemos mucho que aportar cerrando el paso a mezquindades y ambiciones personales o de grupo.

Unidad, más Unidad y sólo con Unidad avanzaremos en el camino correcto con la historia transformadora que brinde bienestar al pueblo.


“… La transformación exige grandes objetivos que sólo se cumplen mediante el esfuerzo, la disciplina cotidiana y la convicción de aportar por el bien común…” Osiris Leines.


En los próximos días habrán de dar inicio las campañas electorales, tanto federales como locales, en las cuales renovaremos en el Estado de Hidalgo desde los 84 Ayuntamientos, el Congreso Local y participaremos en la renovación del Congreso de la Unión y la elección por la Presidencia de la República; en este contexto deseo invitarles a hacer una profunda reflexión sobre los principales cambios y transformaciones vividas en nuestro país y en nuestro Estado con el inicio y puesta en marcha de la denominada Cuarta Transformación de la vida pública de México; en primera instancia, expreso mi profundo respeto a lo que usted estimada y estimado lector puedan pensar sobre el balance y análisis de lo que ha sido este sexenio que está a punto de concluir; lo que sí resulta innegable es que no hace muchos años parecía imposible un cambio de rumbo en cuanto a los gobiernos tecnócratas y la aplicación de sus políticas, y resultaba impensable un gobierno emergido de la izquierda, que inicia un cambio profundo en la vida pública de nuestro país.

Pero ¿cuál fue la esencia de la transformación? sin duda alguna, por primera vez en muchas décadas, poner en el centro de las decisiones públicas a los marginados, a los excluidos, a las masas, a los sectores populares; en síntesis, al pueblo bueno, desesperado y agraviado por la imposibilidad de recibir el mínimo apoyo para salir de sus circunstancias adversas.

Ante esta situación Claudia Sheinbaum como Coordinadora de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación en el país y virtual candidata a la Presidencia de la República, goza de la confianza de los integrantes del Movimiento y del respaldo popular, consecuencia de una amplia trayectoria y experiencia política que la ha llevado a gobernar una de las ciudades más grandes e importantes del mundo; sin embargo, son múltiples los retos que tiene por delante, como el de dar continuidad a un gobierno de izquierda en el que coexisten grupos democráticos progresistas, corrientes socialdemócratas, integrantes de lo que se ha denominado la izquierda tradicional y un número muy importante de incorporaciones de diferentes movimientos populares y de partidos políticos que se han sumado al Movimiento de la Cuarta Transformación.

El gran reto que enfrenta Claudia Sheinbaum es sostener y reafirmar la aportación más importante que ha tenido el obradorismo a la sociedad contemporánea, el cual ha sido el cambio de paradigma de gobernar en favor de las mayorías para revertir las profundas desigualdades que coexisten en nuestro país; son muchas las expectativas que se tienen para este próximo sexenio manteniendo esta premisa, gobernar pensando y decidiendo en favor de los sectores más desprotegidos y manteniendo la convicción de un gobierno de izquierda moderna

¿Qué implica un gobierno de izquierda para los próximos años? implica una gestión que vaya por afianzar y ampliar los derechos humanos e incluya las agendas de grupos progresistas como el feminismo; aunado de garantizar el pleno ejercicio de las libertades que permita una amplia discusión cultural e intelectual sobre las realidades y los grandes retos presentes y futuros de nuestro país; dialogando y atendiendo necesidades inaplazables como lo son las grandes problemáticas que están generando crisis como es el tema del medio ambiente, y afianzando una relación de autonomía pero también de confianza entre el poder económico y el poder político, sin dejar de garantizar el respeto entre poderes; en síntesis, que lograremos consolidar un gran proyecto de gobierno para la consolidación de la Cuarta Transformación que tiene en el centro ampliar los programas sociales, dotándolos de universalidad y constituyéndolos como derechos.

Todo lo que está en juego en la próxima elección está fuertemente vinculado con lo que el Presidente de la República ha denominado el Plan C, el cual es una invitación a todo el electorado del país para que apoye y respalde la Cuarta Transformación para que logre una mayoría calificada en el Congreso de la Unión, y con ello dar paso a las reformas profundas que requiere el país en materia político- electoral, económica, de salud, del propio Poder Judicial para poder transitar de un modelo corrupto y caduco, a una instancia garante de la justicia como una de las deudas históricas más grandes que tiene México.

Consolidar la mayoría en el Congreso de la Unión, en los congresos locales, en los ayuntamientos y en los diferentes espacios de poder en todo México, exigirá de un profundo análisis de los líderes del movimiento, de los partidos políticos que lo integran, de las diferentes corrientes y sectores sociales que participan, a efecto de integrar candidaturas que gocen del respaldo de las bases populares del propio Movimiento de la Cuarta Transformación; quien caiga en la tentación y el oportunismo de querer convertir espacios o zona geográficas del país en parcelas de poder personal, pone en grave riesgo el proyecto transformador y las grandes tareas que tenemos pendientes por resolver las y los mexicanos.

Reitero mi llamado respetuoso a la unidad, no como la anquilosada disciplina partidista del pasado que no discute y no cuestiona; sino como la posibilidad de construcción de un diálogo entre las diferentes fuerzas y representaciones de quienes estamos dentro del Movimiento de la Cuarta Transformación, todos cabemos y tenemos mucho que aportar cerrando el paso a mezquindades y ambiciones personales o de grupo.

Unidad, más Unidad y sólo con Unidad avanzaremos en el camino correcto con la historia transformadora que brinde bienestar al pueblo.


“… La transformación exige grandes objetivos que sólo se cumplen mediante el esfuerzo, la disciplina cotidiana y la convicción de aportar por el bien común…” Osiris Leines.