/ sábado 9 de marzo de 2019

León Trotsky en México

El creador del Ejército Rojo, desterrado y desarmado, llegó a Tampico, México, a bordo del barco “Ruth” el 9 de enero de 1937.

Venía de Turquía, Francia y Noruega, perseguido por Stalin.

A la muerte de Lenin, Stalin, convertido en el hombre fuerte de la URSS, expulsó “por traición” en 1929 del buró político a León Trotsky.

El Partido Comunista de México, identificado con Trotsky, al conocer la persecución de la que era objeto, solicitaron al gobierno asilo político para él y su esposa Natalia.

Octavio Fernández, Diego Rivera y otros comunistas buscaron al general Francisco G. Múgica, que a su vez participó de esta solicitud al presidente Cárdenas.

El Presidente de México de inmediato aprobó la petición de asilo para León Trotsky.

El único requisito que propuso el gobierno era que el asilado No participara en la vida política de México.

Al bajar del barco “Ruth”, León Trotsky y Natalia, a bordo del tren presidencial Hidalgo, se trasladaron a la Ciudad de México.

El hospedaje corrió a cargo de Diego Rivera en la Casa Azul. Hogar que luego tuvo que abandonar, en 1939, por una discusión que tuvo con el pintor.

En Rusia, Stalin daba rienda suelta a su odio y exterminaba a la familia de León Trotsky.

Hasta México llegaron agentes soviéticos que intentaron matar al soviético.

Incluso sobrevivió León a un atentado encabezado por David Alfaro Siqueiros.

Fue el 24 de mayo de 1940.

Trotsky resultó con dos heridas en una pierna. Cuando los atacantes huyeron, expresó a su esposa: “Sí, Natalia, nos han concedido un plazo”.

Posteriormente, 90 días después, Ramón Mercader, agente ruso, al hacerse amigo de la hermana de la secretaria de León Trotsky, tuvo acceso a la casa del revolucionario.

El 20 de agosto de 1940 Mercader le mostró a León un escrito con el pretexto de pedir opinión sobre una nota que había escrito.

León Trotsky revisó el documento y entonces sintió el golpe en la cabeza.

Herido de muerte trató de alertar a su esposa: “Natasha, te amo…”, balbuceó. Luego perdió el conocimiento. Fue trasladado a un hospital y ahí murió.

Lázaro Cárdenas acusó al Partido Comunista de traición a la patria, por haberse prestado a ser brazo armado de un país extranjero para cometer un homicidio en contra de un húesped de nuestra tierra.

19 años 9 meses pasó preso en México su asesino. Mercader murió en Cuba. Antes, en 1977 fue condecorado con “La Estrella de Oro” que la URSS entregaba a sus héroes.

El creador del Ejército Rojo, desterrado y desarmado, llegó a Tampico, México, a bordo del barco “Ruth” el 9 de enero de 1937.

Venía de Turquía, Francia y Noruega, perseguido por Stalin.

A la muerte de Lenin, Stalin, convertido en el hombre fuerte de la URSS, expulsó “por traición” en 1929 del buró político a León Trotsky.

El Partido Comunista de México, identificado con Trotsky, al conocer la persecución de la que era objeto, solicitaron al gobierno asilo político para él y su esposa Natalia.

Octavio Fernández, Diego Rivera y otros comunistas buscaron al general Francisco G. Múgica, que a su vez participó de esta solicitud al presidente Cárdenas.

El Presidente de México de inmediato aprobó la petición de asilo para León Trotsky.

El único requisito que propuso el gobierno era que el asilado No participara en la vida política de México.

Al bajar del barco “Ruth”, León Trotsky y Natalia, a bordo del tren presidencial Hidalgo, se trasladaron a la Ciudad de México.

El hospedaje corrió a cargo de Diego Rivera en la Casa Azul. Hogar que luego tuvo que abandonar, en 1939, por una discusión que tuvo con el pintor.

En Rusia, Stalin daba rienda suelta a su odio y exterminaba a la familia de León Trotsky.

Hasta México llegaron agentes soviéticos que intentaron matar al soviético.

Incluso sobrevivió León a un atentado encabezado por David Alfaro Siqueiros.

Fue el 24 de mayo de 1940.

Trotsky resultó con dos heridas en una pierna. Cuando los atacantes huyeron, expresó a su esposa: “Sí, Natalia, nos han concedido un plazo”.

Posteriormente, 90 días después, Ramón Mercader, agente ruso, al hacerse amigo de la hermana de la secretaria de León Trotsky, tuvo acceso a la casa del revolucionario.

El 20 de agosto de 1940 Mercader le mostró a León un escrito con el pretexto de pedir opinión sobre una nota que había escrito.

León Trotsky revisó el documento y entonces sintió el golpe en la cabeza.

Herido de muerte trató de alertar a su esposa: “Natasha, te amo…”, balbuceó. Luego perdió el conocimiento. Fue trasladado a un hospital y ahí murió.

Lázaro Cárdenas acusó al Partido Comunista de traición a la patria, por haberse prestado a ser brazo armado de un país extranjero para cometer un homicidio en contra de un húesped de nuestra tierra.

19 años 9 meses pasó preso en México su asesino. Mercader murió en Cuba. Antes, en 1977 fue condecorado con “La Estrella de Oro” que la URSS entregaba a sus héroes.