/ miércoles 10 de agosto de 2022

La Salpingoclasia, método anticonceptivo definitivo

Ayuda a prevenir el cáncer de ovario, no altera la producción de hormonas y no produce aumento de peso ni menopausia prematura

La salpingoclasia, coloquialmente conocida como “la salpingo”, es un método anticonceptivo permanente que se realiza a las mujeres que ya no quieren más embarazos y que ya han recibido previamente consejería, regularmente este procedimiento quirúrgico se les realiza a las mujeres después de haberle realizado un parto natural, un aborto o durante la cesárea, sin embargo, el proceso se puede realizar en cualquier momento.

La salpingoclasia de intervalo es un procedimiento totalmente desvinculado del parto o la cesárea, si la mujer ya ha sido madre hay que dejar pasar mínimo dos meses después del alumbramiento para realizarlo, esto con el fin de que el útero recupere su tamaño normal.

La minilaparotomía es una de las técnicas más utilizadas para realizar una salpingoclasia de intervalo, este procedimiento requiere solo un corte en el vientre por encima del pubis de no más de tres centímetros, anestesia local y sedación endovenosa.

La incisión permite atravesar las capas de tejido (piel, grasa y músculos) hasta llegar a la cavidad abdominal, con ayuda de un instrumento parecido a un gancho se toma la trompa para proceder a ligar o cortar y se regresa a la cavidad, para realizar el mismo proceso con la otra trompa, la intervención dura de 15 a 20 minutos.

Dentro de las ventajas que tiene realizarse una salpingoclasia destaca que es una intervención sencilla (la paciente no necesita estar en hospitalización al terminar el procedimiento, la recuperación es rápida (aproximadamente siete días), ayuda a prevenir el cáncer de ovario, su efecto anticonceptivo es inmediato, no afecta la producción de hormonas y no produce aumento de peso ni menopausia prematura.

Las desventajas de esta práctica es que al ser una anticoncepción definitiva si en algún momento se desea un embarazo, se tendría que someter a una reversión de salpingoclasia pero son pocas las posibilidades de que haya éxito, además no protege contra enfermedades de transmisión sexual, puede producir cambios en el ciclo de menstruación.

Este procedimiento no se recomienda en mujeres con sobrepeso u obesidad ya que puede ser complicado encontrar las trompas de Falopio.

La salpingoclasia, coloquialmente conocida como “la salpingo”, es un método anticonceptivo permanente que se realiza a las mujeres que ya no quieren más embarazos y que ya han recibido previamente consejería, regularmente este procedimiento quirúrgico se les realiza a las mujeres después de haberle realizado un parto natural, un aborto o durante la cesárea, sin embargo, el proceso se puede realizar en cualquier momento.

La salpingoclasia de intervalo es un procedimiento totalmente desvinculado del parto o la cesárea, si la mujer ya ha sido madre hay que dejar pasar mínimo dos meses después del alumbramiento para realizarlo, esto con el fin de que el útero recupere su tamaño normal.

La minilaparotomía es una de las técnicas más utilizadas para realizar una salpingoclasia de intervalo, este procedimiento requiere solo un corte en el vientre por encima del pubis de no más de tres centímetros, anestesia local y sedación endovenosa.

La incisión permite atravesar las capas de tejido (piel, grasa y músculos) hasta llegar a la cavidad abdominal, con ayuda de un instrumento parecido a un gancho se toma la trompa para proceder a ligar o cortar y se regresa a la cavidad, para realizar el mismo proceso con la otra trompa, la intervención dura de 15 a 20 minutos.

Dentro de las ventajas que tiene realizarse una salpingoclasia destaca que es una intervención sencilla (la paciente no necesita estar en hospitalización al terminar el procedimiento, la recuperación es rápida (aproximadamente siete días), ayuda a prevenir el cáncer de ovario, su efecto anticonceptivo es inmediato, no afecta la producción de hormonas y no produce aumento de peso ni menopausia prematura.

Las desventajas de esta práctica es que al ser una anticoncepción definitiva si en algún momento se desea un embarazo, se tendría que someter a una reversión de salpingoclasia pero son pocas las posibilidades de que haya éxito, además no protege contra enfermedades de transmisión sexual, puede producir cambios en el ciclo de menstruación.

Este procedimiento no se recomienda en mujeres con sobrepeso u obesidad ya que puede ser complicado encontrar las trompas de Falopio.

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