Ubicado a 20 minutos de la capital del estado, en Epazoyucan, el Tuzoofari ofrece una experiencia tipo expedición, ya sea en vehículo particular o en alguna de las unidades del centro de fauna silvestre en el que a lo largo de ocho de sus nueve estaciones se puede interactuar con animales de diversas latitudes del mundo. Rocío Herrero, gerente de operaciones, refirió que el Tuzoofari es un parque de conservación de fauna silvestre donde los animales deambulan en libertad controlada y en cautiverio.
El recorrido inicia en el Himalaya, donde hay especies como el avestruz, el cerdo vietnamita, coyotes, emúes, jabalíes y aves como el pecarí de collar. La segunda estación es denominada Okavango, en la que los animales más visitados son los hipopótamos y los cocodrilos, además de otras especies como el borrego cuatro cuernos y el burro enano. Yellowstone es como se conoce a la tercera área de interacción en la que se puede alimentar a las alpacas, y ver muy de cerca al gamo y muflón europeo, además de wapitíes.
Las áreas cuatro y cinco, Machu Picchu y Baikal, respectivamente, son dos de los espacios con un mayor número de animales salvajes, entre las que se encuentran los antílopes, chimpancés, lobos canadienses, el oso negro y las hienas rayadas. El recorrido está diseñado para que conforme se avanza en el safari, los paseantes aprecien especies cada vez más exóticas, es por ello que en el área seis, Serengueti, se cuentan con jaguares, león africano, el de barbari, blanco, así como los tigres de bengala y el blanco.