Viajar de Huauchinango, Puebla a Tulancingo y viceversa, se ha convertido en un auténtico suplicio, debido al incremento de asaltos en autobuses de diferentes líneas, que son muy violentos.
En el más reciente, de acuerdo con reportes de usuarios, muchos empleados que habían cobrado sus aguinaldos, fueron despojados de su dinero y pertenencias.
Este atraco, fue en los límites de los estados de Hidalgo y Puebla, donde tres sujetos, amagaron con pistolas a los usuarios, golpeando a varios de ellos.
Incluso algunas de las víctimas, comentaron que los presuntos implicados, manosearon a unas jovencitas.
Algunas personas que han sido objeto de estos ilícitos, comentaron que se les hace muy difícil realizar su denuncia, ya que en ocasiones desconocen a qué agencia del Ministerio Público tendrían que dirigirse, si a Tulancingo o Huauchinango.
Agregaron que, de acuerdo a algunas experiencias, el trato que les brindan en esas instancias, no es el adecuado, ya que los tienen horas esperando.
Cabe señalar, que algunos de los rateros, ya son plenamente identificados por sus víctimas.
“Por lo regular, se suben en la Virgencita, por Catalina, en Huauchinango y unos cuatro kilómetros adelante se bajan.”
Otros usuarios comentaron que, en ocasiones, posibles abordan el autobús en el centro de la citada ciudad poblana y cometen sus fechorías antes en la zona limítrofe de estas entidades y se bajan en la desviación de Zacatlán, municipio de Acaxochitlán.
Al respecto, solicitaron que haya mayor vigilancia en las carreteras, ya que inevitablemente se tiene que seguir viajando y hacer uso del transporte público.
De acurdo a versiones de operadores de autobuses que cubren esta ruta este año han sido objeto de por lo menos, ocho asaltos.
