Cipriano N.N., diputado federal desaforado, solicitó a través de su defensa ser valorado por un médico, porque presentaba dolores de cabeza y calambres en los pies.
Lo anterior, durante una audiencia pública en la que también se ventiló el disgusto que le genera al imputado portar el uniforme de recluso: pantalón color caqui y camisa blanca, así como chamarra café.
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La jueza de control, Janeth Montiel Mendoza, ordenó una valoración inmediata, la cual estaría a cargo del médico legista de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo.
Asimismo, ordenó que en todo momento se vigile su estado de salud para dar cumplimiento con el artículo cuarto constitucional, que se refiere el derecho a la salud de todas las personas.
Respecto a la vestimenta, la jueza dijo no poder hacer nada, debido a que son reglas, normas y protocolos del centro de readaptación social; no obstante, accedió a que en cada audiencia porte un saco, blazer, suéter o chamarra de su preferencia.
En otro orden de ideas, la defensa solicitó a la jueza se verifique si uno de los testigos presentados por el agente cuenta con una orden de aprehensión en su contra, pero la jueza respondió que eso sería ilegal, por lo que no accedió.
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