Según el reporte oficial de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en la actualidad el espejo de agua ubicado en la comunidad de Zozea, municipio de Alfajayucan, se encuentra en un dos porciento.
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Este porcentaje de su capacidad representa un mínimo histórico, que ha llevado a los campesinos así como a los pescadores, a repensar sus actividades económicas que brindan sustento a sus familias.
En un recorrido que este reportero realizó por este vaso de agua, se constató que los pescadores en la actualidad han preferido dedicarse a otras actividades para sostener a sus familias.
Los pescados no pueden vivir en agua que tenga una temperatura mayor a los treinta grados centígrados, relataron los socios de la cooperativa de pescadores Zozea, quienes se mostraron preocupados por la falta de lluvia.
El afluente que alimenta de agua a este embalse se encuentra hacia la comunidad de Cerro Azul, en el mismo municipio donde está la presa Rojo Gómez que a su vez es alimentada por el canal de interconexión que provienen de la Presa Endhó ubicada en la región de Tula –Tepeji.
En este espejo de agua existe un desarrollo turístico donde los cooperativistas desarrollan, actividades como paseo en lancha o pesca deportiva, a los turistas que llegan o visitan este municipio.
Además en las riberas de este embalse se han construido un restaurante donde se ofrecen platillos como pescados, arroz o mariscos, además de bebidas como refrescos o micheladas.
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En donde antes había agua con una profundidad de más de diez metros, hoy el polvo y la arena blanca cubren el paisaje, mientras que pastores de rebaños de chivos y borregos buscan la última bocanada de agua.
La fauna nativa o migratoria como pelícanos, garzas, tortugas, mojarras, o aves acuáticas han desaparecido y otras han migrado hacia otros espejos de agua, para continuar su ciclo de vida.
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