Esta mañana, sujetos armados dispararon contra las instalaciones de la delegación de la comunidad indígena de Xochitlán, ubicada en el municipio de Progreso de Obregón.
Luego de escucharse las detonaciones, se dio parte a la autoridad del lugar, quien solicitó el apoyo de elementos de seguridad pública del estado, a través del mando coordinado que se tiene con el ayuntamiento.
Los uniformados acordonaron el inmueble, con el objetivo de que no se contaminara el área correspondiente, para que se llevaran a cabo las investigaciones correspondientes.
En el inmueble se contabilizaron 8 impactos, y en el piso se encontraron casquillos percutidos calibre 22 milímetros.
Según versión de los vecinos, los hechos pudieron haber sido consecuencia de que ayer, domingo 30 de octubre, en asamblea comunitaria, se ventiló en público la situación de que algunas personas se han dedicado al supuesto despojo de terrenos, propiedad del pueblo de Xochitlán.
Cabe mencionar que lugareños de esta comunidad hace aproximadamente 15 días, el 17 de octubre, cerraron la carretera por los robos frecuentes de automóviles en la zona
Tras el bloqueo, exigieron al gobierno del estado de Hidalgo seguridad, ya que los vecinos temen por su integridad y la de su familias, ante el aumento de los índices de delincuencia en la región.
Los acuerdos entre la comunidad y el Gobierno para abrir la carretera fueron: colocar cámaras de vigilancia conectadas al C5i, además de la asignación de dos patrullas que estarían de manera permanente en Xochitlán.
Otro de los acuerdos de la mesa de trabajo fue realizar la elección de delegados el próximo 6 de noviembre, ya que los habitantes de esta localidad no confían en su autoridad comunitaria, además reclamaron al delegado municipal en funciones no apoyarlos en gestiones sociales, de seguridad y comunitarios.
En entrevista con pobladores de esta comunidad, quienes omitieron sus identidades por temor a represalias, manifestaron su preocupación.
Es un problema, dijeron, que puede tener consecuencias lamentables, ya que no existe estrategia de seguridad: no hay prevención, contención o reparación.
Comentaron que el acuerdo con el alcalde Armando Mera, es que se comprometía a respetar la elección interna y no meter las manos en este proceso comunitario.
“Ha traicionado su palabra, ya que en una circular del ayuntamiento de Progreso, se propone reelegir a la actual delegación municipal, a fin al partido oficial Morena”, aseveraron.
Explicaron que hay un fuerte conflicto de interés entre el grupo político del presidente municipal y el pueblo de Xochitlán.
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La delegación baleada sirve como observatorio de la policía municipal, y por eso, dijeron, se nos hace raro que la hayan atacado,
“Además, el reporte oficial se dio hasta después de las 9 de la mañana. Que raro”, mencionaron.
Recoerdaron que el municipio de Progreso de Obregón se salió del Mando Coordinado durante el periodo de gobierno estatal del priísta Omar Fayad, y hasta ahora regresó, con la nueva administración morenista.
“Ahí estás las consecuencias”, expresaron.
Por la tarde llegó la Guardia Nacional, cuando se estaba llevando a cabo una reunión entre habitantes de la comunidad
