Existe una colonia muy particular en Tulancingo pues cuenta con un elemento aún más particular que trajeron desde un aeropuerto para darle identidad a una colonia, y se trata de la avioneta de la Ahuehuetitla.
El señor Constantino Pérez, quien nació y creció en la colonia tulancinguense, siempre fue un aficionado del aire y por puro altruismo y amor al lugar del que es oriundo luchó por traer una avioneta del aeropuerto Ingeniero Juan Guillermo Villasana, en Pachuca.
El señor Pérez relató que fue durante la administración del expresidente Ricardo Bravo que comenzó la gestión para solicitar el avión; sin embargo, por la entrega-recepción, esto se concluyó en la primera administración del actual edil, Jorge Márquez Alvarado.
“Yo ingresé el oficio al aeropuerto (...) Envié el oficio a gobierno del estado diciendo que hay un avión que me pueden dar, cuando ellos lo checan la respuesta que me dan es que ´no se lo podemos otorgar porque no está en la cartera de bienes del estado´”, contó Pérez.
AVIONES BAJO INVESTIGACIÓN
Los aviones sin utilizar en el aeropuerto Ingeniero Juan Guillermo Villasana, en Pachuca, no estaban del todo disponibles, según contó Constantino pues unos modelos que fueron usados en crímenes, eran investigados y otros tenían severas fallas mecánicas o tenían dueño.
Siguió su relato explicando que a pesar de la incertidumbre por parte del gobierno del estado, por un mero golpe de suerte y una carta escrita por niños de la colonia dirigida al capitán y director del aeropuerto, Alfredo Ahedo Mayorga, fue que en cuatro meses le confirmaron que podían darle la avioneta.
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