Los puentes peatonales son estructuras que fueron diseñadas para proporcionar seguridad a la población que cruza las carreteras en zonas urbanas, sin embargo, son poco utilizados en la capital, debido a diversas razones como la falta de alumbrado público y a que su uso implica más tiempo de traslado.
“Están muy largos, se pierde tiempo en subirlos, a veces se tiene que caminar mucho para llegar a ellos, por eso prefiero cruzar por abajo, obviamente es un riesgo, pero a veces da lo mismo que arriba”, contó María Fernanda Gálvez.
Este tipo de infraestructura vial a veces no cuenta con las medidas necesarias para su correcto uso, por lo que crea incertidumbre en los peatones: “En la mañana o tarde no hay problema, pero en las noches es muy complicado pasar por aquí, está muy oscuro, por eso la gente se cruza así o algunos le caminan hasta el semáforo”, explicó Flor García.
De igual modo, explicó que el puente cercano a la secundaria técnica 38, ubicada sobre boulevard Minero, es un sitio inseguro: “Pasa mucha jovencita, a veces viene la patrulla a cuidar, pero sería bueno que colocaran más lámparas, para que todos tengamos más seguridad”, expresó García.
La importancia de la cultura vial radica en la prevención de accidentes de tránsito, tanto de peatones, como conductores y motociclistas, quienes deben de respetar los señalamientos al transitar por las avenidas:
“Nosotros como adultos debemos de inculcar a los hijos valores, lo que está bien y mal, veo a veces personas toreando a los autos con niños en brazos o los jalan para que corran, es verdad que hay inseguridad y poca luz, pero también uno debe de poner de su parte”, refirió Jimena, de las pocas personas que aún utiliza este tipo de infraestructura.
