La temporada de higos comenzó en el Valle del Mezquital

El higo es el fruto de la higuera (Ficus carica), en esta especie la organización floral es bastante compleja, ya que en un principio se pensó que la higuera no tenía flores, sin embargo, las flores están ocultas, dentro su composición.

Las flores están encerradas en el interior de un receptáculo en forma de pera color negro o café oscuro, que originarán pequeños aquenios vulgarmente llamados pepitas, rodeados de un mesocarpio carnoso y que son los verdaderos frutos de la higuera. Al conjunto se le da el nombre de sicono y constituye el higo que, entonces, es un falso fruto.

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Estas flores – frutos, son polinizadas por la avispa de los higos (Blastophaga psenes) es un himenóptero apócrito de la familia Agaonidae. Es una de las especies de avispas encargadas de la polinización de los higos. La polinización la realizan las avispas hembras que entran al sicono por un orificio natural llamado ostiolo y ponen los huevos dentro de éste.

Los higos, son una de las frutas de temporada que se cultivan en el Valle del Mezquital, sin embargo en años recientes los campesinos que acostumbraban a aprovechar los riegos por inundación y plantaban en los bordos estos árboles han dejado de hacerlo.

Esto sucede por la falta de asesoramiento, informó el campesino Claudio Vicente, propietario de una huerta de higos en San Salvador, quien comunicó que él gusanos barrenador ha matado algunas de sus higueras.

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Por ello es que los campesinos consideran que el higo no es conveniente plantarlo ya en sus huertas por su poca resistencia a las plagas y enfermedades, en el pasado los higos vivían por veinte años, ahora ha quinto año se secan y mueren lamentó el campesino.

A causa del desabasto, la alta demanda y la poca oferta, los precios de la docena de higos se han elevado a más de cien pesos, mientras que las cajas de veinte kilos superan los quinientos pesos.

Una parte de la cosecha de las higueras es vendida en los tianguis locales, otra parte es llevada a la central de abasto de la Ciudad de México, donde alcanzan valores de hasta mil pesos por caja, informó el agricultor Claudio Vicente.