Aunque la venta de libros había registrado una baja en meses anteriores, actualmente se está levantando con un notorio interés niños y jóvenes en la lectura, señaló en entrevista Diego Cruz Copca, encargado de la librería Librero en Andanzas.
De hecho, afirmó, muchos clientes acuden al establecimiento en busca de ejemplares en físico que leyeron previamente en digital, debido a que esas versiones suelen venir incompletas.
Aun con el contexto económico actual, precisó que estos materiales, que siempre tienen una historia que contar, si se venden.
Incluso, en su establecimiento, en un día bueno se comercializan entre 50 y 60 libros. En este contexto, invitó a los pachuqueños a visitar este tipo de negocios, “siempre hay algo que te va a llamar la atención y hará que leas, incluso, hay muy buenos autores que casi nadie conoce”.
Su opinión contrastó con la del encargado de la librería Dragones y Dinosaurios, quien aseguró que el libro está en peligro de extinción, toda vez que su demanda es muy poca y para muestra, los locales prácticamente vacíos.
“Todos los instrumentos que tienen que ver con la cultura son objetos en peligro de extinción”, dijo.
En su opinión, la población que tiene el hábito de consumir libros, es aquella que se mantendrá como fiel consumidora de estos materiales. En contraste, aquellos que no lo son, simplemente no se sentirán cautivados por la lectura.