TULA DE ALLENDE, HGO.-Se violó la ley y no se considera a los habitantes pobres y damnificados de la pasada inundación en el presupuesto de egresos para el ejercicio fiscal 2023 y el cual fue aprobado a destiempo en sesiones de cabildo del Ayuntamiento de Tula.
Así lo expresaron, ayer, los regidores Araceli Rivera Díaz, Evangelina López Cornejo y Ricardo González, durante conferencia de prensa celebrada en conocido restaurante de esta ciudad.
Los representantes populares coincidieron en decir que el presupuesto para este año quedo en la cantidad de trescientos cuarenta y cinco millones 510 mil ciento veintiocho pesos con noventa y seis centavos y bajo cuarenta millones de pesos a comparación del año pasado 2022.
Además que en la clasificación de presupuesto en gasto corriente quedo en 81.14 por ciento y para gastos de obra pública solo se destinaron más de cincuenta y cinco millones de pesos, es decir el dieciséis por ciento, y el dos por ciento es para jubilados y pensionados.
“La recaudación es mala en el municipio de Tula de Allende porque no hay confianza en la población y hay un cincuenta y un por ciento que no paga su predial ni el agua potable y como ejemplo esta la cementera La Cruz Azul que debe aproximadamente treinta y cinco millones de pesos por concepto del impuesto predial del año anterior” dio a conocer Ricardo González.
Añadió el regidor que mientras tanto el 42.55 por ciento de presupuesto se va para el pago de nómina de ochocientos sesenta y tres trabajadores de la alcaldía de los cuales quinientos cuarenta y cuatro son de confianza.
“El presupuesto de este año no se norma a los lineamientos legales y la distribución de recursos es poco social y no se consideran las necesidades más básicas y apremiantes que requiere el municipio en la actualidad como atender drenajes públicos colapsados y tapar muchos baches que hay en distintas calles y avenidas de la ciudad y falto mucha consideración hacia la sociedad tulense” refirió.
Mientras que la regidora Araceli Rivera indicó que no hay presupuesto etiquetado de manera específica para los ciudadanos damnificados que dejo la inundación de hace más de un año en Tula.
“Tampoco no se norma a los lineamientos legales el presupuesto de egresos para el ejercicio fiscal 2023 de más de 345 millones de pesos que se contempló en dos sesiones de cabildo del Ayuntamiento de Tula durante los últimos días del pasado mes de diciembre del año 2022 y la distribución de recursos es poco social y no considera necesidades y carencias de la población, sobretodo damnificada, y debería atender necesidades básicas y apremiantes y le faltó consideración social y se violó la ley orgánica del municipio” mencionó.
Araceli Rivera sugirió que se pudiera utilizar una parte del presupuesto en el rubro del drenaje público de la zona centro de la ciudad que actualmente se encuentra colapsado a raíz de la pasada inundación.
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“Negarme a la aceptación del presupuesto de egresos y modificaciones por considerarlos no adecuados a esa normatividad en cuanto a tiempos y formas y como lo marca la ley las modificaciones deben hacerse antes del gasto y con aprobación del pleno y es irregular y fuera del marco legal y el presupuesto del año 2023 fue presentado de manera extemporánea pues debió presentarse antes del día primero de diciembre del año pasado” expresó la munícipe.
Los regidores finalmente señalaron que el presupuesto no satisface las necesidades de la ciudadanía en general de Tula y será poco útil para la reactivación económica tras suceder la inundación aquí.
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