El director general de Protección Civil del Gobierno de Hidalgo, Enrique Padilla Hernández, señaló que no hay alarma, pero sí están alertas por los efectos que puedan ocasionar en la entidad las explosiones que registra el volcán Popocatépetl en los últimos días.
Son cinco municipios, dijo, los que más están expuestos a posibles consecuencias, en caso de una explosión mayor.
Se trata de Almoloya, Emiliano Zapata, Apan, Tepeapulco y Tlanalapa, aunque también podrían sumarse algunos otros.
“Mucho depende de la magnitud de la explosión, así como del tamaño de las fumarolas. Entre más altas, más lejos pueden llegar las cenizas, incluso hasta Pachuca”, explicó.
Informó que a través del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) se monitorea diariamente el nivel de riesgo.
Como Protección Civil estatal, dijo, estamos en contacto con los ayuntamientos y con el vecino estado de Puebla. “No hay alarma, pero sí prevención. Los restos que exhala el volcán podrían cambiar de un momento a otro”, indicó.
Recordó que hace como diez años, aproximadamente, ocurrió lo mismo y las cenizas llegaron hasta la zona metropolitana de Pachuca.
No dudamos que pueda llegar a ocurrir lo mismo, agregó, por eso estamos prevenidos.
“La dirección y velocidad del viento tendrán mucho que ver, por eso es constante el monitoreo a través del Cenapred”, sostuvo.
Finalmente, dio a conocer que en caso de una situación mayor, más preocupante, será el gobierno federal quien tome las decisiones de lo que se tenga que hacer.
“Lo primero será, sin duda, garantizar la seguridad de las personas”, concluyó.
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