Abiertas inscripciones para matrimonios colectivos en la Parroquia de la Asunción en Pachuca

Con la intención de unir a las parejas de enamorados por la vía religiosa, la Comunidad Parroquial de la Asunción de María en Pachuca tiene abiertas las inscripciones para participar en los matrimonios colectivos que se llevarán a cabo en el mes de agosto, durante la fiesta patronal de la instancia religiosa.

Para llevar a cabo dicho Sacramento, los contrayentes deberán asistir los domingos a un curso de formación que inicia el próximo 14 de mayo, en un horario de 12 a 14 horas en ‘La Academia’, ubicada en San Agustín del Río número 101 B.

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Estas son las diferencias entre Sacramentos y Sacramentales 

Uno de los requisitos esenciales para llevar a cabo el matrimonio es tener la Fe de Bautismo, por lo que para las inscripciones a este curso es necesario presentar en la oficina parroquial, boleta de Bautismo actualizada y dos fotografías tamaño infantil de cada uno de los interesados.

Este tipo de procesos antes de casarse sirven para corroborar que ya se tengan los Sacramentos de Bautismo, Comunión y Confirmación y en caso de que alguno de los novios no cuente con alguno de ellos, este tiempo servirá para completarlos y para asegurarse que quieren unir sus vidas en nombre de Dios para ayudarse mutuamente y formar una familia.

Por ello, la duración de este proceso será diferente para cada una de las parejas, por lo que mientras algunas asistirán dos o tres domingos, otras deberán hacerlo más días; de igual modo, estarán obligados a presentar dos testigos cada uno el día de su matrimonio.

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El 90% de los matrimonios son sociedades conyugales

El Matrimonio en la religión católica pertenece a uno de los siete Sacramentos de la iglesia, por lo que es tan importante como el Bautismo; la Confirmación; la Comunión o Eucaristía; la Unción de los enfermos y la Orden Sacerdotal.

En la Biblia se menciona al Matrimonio tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento y hace recomendaciones a los esposos para llevar una vida acorde a los ojos de Dios, por lo que mediante él, un hombre y una mujer unen sus vidas para crear una familia y amarse como Dios los ama.