Con un estadio volcado a su equipo, y un encendido Ibáñez, los Tuzos del Pachuca encaminaron las semifinales a su favor, al derrotar 5-2 a Monterrey en un encuentro que tuvo de todo.
Tuvieron que pasar ocho minutos para que la presión de Pachuca y el estadio surtiera efecto, y gracias a un balón que se encontró Nicolás Ibáñez en el área después de un tiro de esquina para ponerle número a la casa.
La alegría no duró más de 10 minutos, pues Pachuca bajó las revoluciones y eso lo aprovecharon los Rayados, que empataron por conducto de Héctor Moreno al 15'.
Sin embargo, los de Almada aprovecharon un descuido de la zaga norteña y Romario Ibarra puso el segundo, al 22', en la frente de los Rayados.
Fue hasta el 40´ cuando Luis Romo igualó los cartones, con un zurdazo que fue escorado a la derecha de Ustari, que nada pudo hacer.
Para la segunda mitad, Almada dio ingreso a Paulino de la Fuente, en lugar de un discreto Avilés Hurtado, y el resultado fue inmediato, pues al 47´el español puso con la cabeza el 3-2 en el tanteador.
Al 62´, Erick Aguirre fue expulsado luego de una revisión del VAR, tras darle una patada a Marino Hinestroza, quien tenía menos de dos minutos en el terreno de juego.
Si no hay emoción en los últimos minutos, no es partido del Pachuca, y los últimos 15 minutos fueron de alarido, pues al 79´Óscar Ustari cometió un penal sobre Jesús Gallardo, y un par de minutos después el argentino atajó el disparo de Funer Mori.
Al 83´, en un acarreo de área a área de Erick Sánchez, el propio 10 recibió un empujón dentro del área que fue señalado como penal, mismo que fue convertido por Nicolás Ibáñez, para convertir el cuarto.
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Por si fuera poco, los Tuzos aumentaron su ventaja y Nicolás hizo su hat-trick, al 92´, cuando aprovechó un rebote para marcar el quinto para los hidalguenses.
A pesar de que el público pedía el sexto, el equipo de Almada no le cumplió el deseo a su gente, pero encaminó la serie a una serie final.
El juego de vuelta será el domingo a las 20 horas en el Gigante de Acero.
