En el estado de Nuevo León, Samuel García solicitó licencia para ir en busca de la candidatura de Movimiento Ciudadano (MC) a la Presidencia de la república, pero luego reviró e intenta regresar a gobernar la entidad porque no le gustó que el Congreso estatal designara a Luis Enrique Orozco como interino en su ausencia.
Este caso nos muestra cómo incluso la definición respecto de quién gobierna uno de los estados más importantes, económicamente hablando, se encuentra entrampada.
Se trata de uno de cientos o miles de casos de servidores públicos que no están dedicados cien por ciento a cumplir las funciones para las que fueron electos o designados.
Hoy suena y resuena el caso de este gobernador neoleonés, pero igual que él hay muchos secretarios de gobiernos estatales y municipales, subsecretarios, directores, jefes de área, en fin.
A lo largo y ancho del país, pasando por Hidalgo, son bastantes los funcionarios que sueñan con convertirse en candidatos dentro del proceso electoral de junio del 2024.
Los que aspiran y que ocupan un cargo en la administración pública se mueven con la intención de permear desde ahora en el ánimo de los electores en busca de apuntalarse para salir bien librados en los procesos internos de los institutos políticos.
Es precisamente por ello que muchas acciones de gobierno han quedado en segundo término y en consecuencia la respuesta a la ciudadanía se demora. A ello hay que sumarle que se acerca el fin de año.
EL DESORDEN ESTÁ EN TODOS LOS PARTIDOS
Hay que destacar que MC no es el único partido político que enfrenta un descontrol en la definición de una candidatura. Nos dicen que son varios, si no es que todos, los institutos que viven momentos de incertidumbre porque no se ponen de acuerdo respecto a qué personas deben encabezar los diferentes proyectos.
Una de las razones es que se carece de liderazgos y otra muy importante consiste en las diferencias y divisiones que se han generado al interior de los partidos políticos, precisamente debido a la búsqueda de las tan preciadas candidaturas.
Y es muy posible que en la medida en que se acerquen las fechas para concretar dichas definiciones, aumenten los problemas y las divisiones dentro de los diferentes institutos, tanto nacionales como locales.
NUEVO AUMENTO AL SALARIO MÍNIMO
Y mientras lo electoral mantiene distraídos a muchos servidores públicos e incluso a buena parte de la sociedad, el pasado viernes el presidente de México anunció que a partir del primer día de enero del 2024 habrá un aumento de 20 por ciento en el salario mínimo.
Con dicho incremento la mínima percepción pasará de 207.44 pesos a 248.93 pesos en el estado de Hidalgo, lo cual contribuirá a la economía de las familias que sobreviven con esa percepción.
Pero aunado a ello es necesario que las autoridades federales y estatales hagan algo para frenar realmente el oleaje de incrementos en los precios de muchos de los productos de consumo básico.
