Unos minutos de descuido marcarán de por vida a humilde familia, al morir su hijo entre las llamas que provocó una veladora en un cuarto de madera, la noche del sábado, en Zacualtipán.
Esta tragedia ocurrió cuando los papás del infortunado niño de seis años, lo dejaron en la cama para según dijeron desconsoladamente, ir a revisar un caballo que tienen amarrado a metros de distancia de su domicilio.
La mortal quemazón de esa casa de madera, ocurrió en una colonia del municipio de Zacualtipán, de lo cual se dieron cuenta los vecinos cuando las llamaradas eran muy intensas, y no alcanzó su esfuerzo de tratar de apagarlas.
No faltó quien marcara al 911, y los operadores del Centro de Control, Comando, Comunicaciones, Cómputo, Coordinación e Inteligencia (C5i), alertaron a la corporación más cercana del inmediato apoyo que se requería.
Se informó que cuando elementos dela Agencia de Seguridad Estatal arribaron al lugar, los vecinos ya habían apagado la casa habitación, quedando en cenizas hasta los muebles y el cadáver entre los escombros.
La madre del menor dijo que no cuentan con servicio de luz eléctrica y que se alumbran con parafinas, y que después de cenar y acostar a su niño, con su esposo salió a ver a un caballo que tenían amarrado a unos metros del domicilio.
La lumbre los alertó de la desgracia yal regresar se sumaron a sus vecinos en la difícil tarea, de la cual dieron cuenta los peritos y el agente del Ministerio Público que levantaron los indicios científicos para iniciar la carpeta de investigación.
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