Andrés Manuel López Obrador afirmó que se debe esperar a que Emilio N termine de declarar sobre el caso de la compra de una planta de agronitrogenados, al tiempo de considerar que “es un testigo protegido de primera”.
Aseguró que se deben de analizar las actas de las reuniones del consejo de administración para saber quiénes votaron a favor y en contra, pero “tengo entendido que se votó a favor de la compra de la planta”.
Desde el Cajeme, Sonora, López Obrador manifestó qué hay quienes votaron en contra y “se debe saber por qué votaron así”.
Puntualizó que las actas son pruebas precisas que deben estar ya en los expedientes de la Fiscalía General de la República.
En las instalaciones del 60 Batallón de Infantería, el Primer Mandatario acotó que este caso tiene que ver con el comportamiento de funcionarios, de ciudadanos supuestamente independientes, porque se fue poniendo la moda de poner en los consejos de administración a “ciudadanos independientes para que hubiese transparencia y no hubiera corrupción, pero no lo eran”.
Dijo que en este caso se pondrá de manifiesto la relación delictuosa, la asociación delictuosa entre funcionarios y empresarios porque “no solo es el funcionario público, es también el llamado hombre de negocio”.
“En el período neoliberal los que hicieron su agosto no eran empresarios, sino traficantes de influencia que no tenían especialidad ni conocimiento, pero tenían relaciones, hasta había medios de comunicación con contratos de obras para Pemex o porque estaban en el negocio de la venta de medicinas”.
Externó que el caso Lozoya va ayudar mucho a que se transparente y que se termine el asunto que ojalá ya la FGR concluya su proceso de investigación en esta parte que tiene que ver el beneficio de aceptarlo como testigo colaborador.
“En el caso de nosotros, lo que nos importa en el Ejecutivo es recuperar lo que se pueda para devolverle al pueblo lo robado, no solo es el castigo en las leyes, sino recoger lo que es de los mexicanos”.
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