A últimas fechas, numerosas personas procedentes de diferentes ciudades tanto de Hidalgo, como de otras entidades, llegan tanto a la cabecera municipal de Huehuetla, como a otras comunidades para adquirir zopilotes.

Alberto Palemón Flores, cronista de esta demarcación, dijo que de acuerdo con versiones de integrantes de la comunidad indígena, esta ave preparada en caldo, tiene propiedades curativas, específicamente para combatir el cáncer.

“Se comenta que la carne se prepara igual que la de una gallina, pero como es muy dura, se ingiere en caldo, con verduras”.

Agregó que es difícil determinar si existen beneficios para la salud, aunque es un hecho que la comercialización de estas especies, es evidente en la región cafetalera.

En tanto, Bartolo Quirino, expresó que hay personas que tienen familiares que padecen cáncer quienes hacen encargos a lugareños de estas aves carroñeras, cuyo costo es de aproximadamente 300 pesos, vivas.

El entrevistado comentó que es un tanto laborioso atraparlas, ya que tienen mucha fuerza, además de que hay que hacer una jaula especial para los traslados a diferentes destinos.

Se comenta que los zopilotes son desplumados y solo la carne es aprovechable, ya que refirió el entrevistado que contrario a lo que algunas personas creen, las plumas no tienen utilidad alguna.

De acuerdo con el libro, “La Medicina Tradicional de los Pueblos Indígenas de México”, los zopilotes, poseen anticuerpos que combaten este mal.

Así también a través de las generaciones de acuerdo con los usos y costumbres de los tepehuas, la carne de zopilote se ha venido utilizando desde tiempos ancestrales para curar a personas que fueron mordidas por perros de rabia.

“Se dice que se producen fuertes sudoraciones al consumirla lo que contrarresta los efectos del virus, hay varios testimonios de gente que prácticamente esta al borde de la muerte y se curó, por esta ingesta, que tiene que ver también en la forma que es preparada la carne por gente que guarda sus secretos”.

Los zopilotes, desempeñan un papel muy importante en el ecosistema, ya que al ser aves carroñeras, literalmente limpian los desechos y colaboran a evitar enfermedades infecciosas al devorar animales muertos antes de que estos entren en descomposición.