ATOTONILCO DE TULA, Hgo.- La demolición en Progreso de Obregón de un antiguo edifico público, donde estaba instalada la biblioteca comunitaria y que funcionó en el siglo pasado como escuela, enfrentó a los colonos.
Mientras algunos aplauden se construya ahí un teatro al aire libre, otros se inconformaron porque no fueron consultados por la alcaldía para su demolición.
El viernes, maquinaria de obras públicas de Atotonilco de Tula comenzó a hacer el derribe de la antigua escuela para ser utilizada por la delegación como biblioteca.
Benito Vargas Alpizar, un hombre de avanzada edad, fue uno de los ciudadanos que se acercaron y expresaron su molestia por la decisión de la alcaldía de demolerlo.
“Van a hacer tiradero, ¡cómo no les costó! No sé quién tomaría el acuerdo de tirar ese edifico de muchos años”, dijo el anciano.
El hombre quien dijo tener 91 años, refirió que esta era la escuela primaria donde él estudió, así como varias generaciones, y por tanto era uno de los edificios que le daban identidad a Progreso, por lo que lamentó que no les hubieran preguntado, pues hubieran defendido el espacio.
Otros vecinos señalaron que pareciera que el alcalde no quiere a la comunidad de donde es oriundo, porque no convocó a una asamblea y permitió que el delegado con un grupo de no más de 30 vecinos que están en un chatt de WhatsApp tomaran la decisión de manera unilateral.
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