ACTOPAN, Hgo.- Si usted gusta un rico café, una tortilla salida del comal o saborear algo más fuerte como un consomé de borrego a mitad de semana, entonces el lugar ideal es el Pabellón Gastronómico.
Apenas entran a esta nave industrial, actualmente nombrada Pabellón con Sabor, enseguida capta el olor del mole verde o rojo, el caldo blanco de guajolote, quesadillas y muchos más que suman 60 sabores, 60 comidas.
Aquí se concentra toda la comida tradicional de la región: hay desde lo acostumbrado como unos frijolitos hasta lo exótico, por ejemplo, codorniz, conejo, chinicuil.
El lugar ya es famoso porque aquí no solo encuentra comida elaborada, también los ingredientes, pues en temporadas ofrecen los escamoles, chinicuiles y demás insectos recientemente atrapados.
Aquí, todos los vendedores están organizados bajo la batuta del Comité que encabeza Rudgar Lemus Cruz, quien informó sobre la encomienda de no subir precios durante diciembre.
Una de las mejores recomendaciones es el paladar de los lugareños, porque la mitad de ellos proviene de Actopan y de los municipios aledaños. “Tenemos clientes de muchos años que no dejan de venir y ellos nos recomiendan, pues lo que más piden las personas es la barbacoa y el ximbó”, dijo.
Rudgar Lemus confesó la evolución en el servicio, higiene e infraestructura, porque la calidad en los alimentos es mejor con un ingrediente obligado: mantener la receta original.
Suman 40 vendedores y entre todos generan más de 200 empleos directos, listos para atender entre dos mil 500 y tres mil visitantes en un día normal, pero que habrá de aumentar ante el arribo de unas cinco mil personas en los siguientes miércoles de tianguis, único día en que atienden de ocho a 17 horas.
Rudgar Lemus, dedicado a la producción de barbacoa, calculó que en un día normal, entre los seis barbacoyeros requieren unos 30 borregos que habrán de duplicarse en los siguientes miércoles de fin de año.
Indicó que las personas pueden llegar y elegir a su gusto, porque el hostigamiento está prohibido, sin pelea. “Las personas vienen a pasar un rato agradable, con alimentos ricos, lo que menos buscamos es ahuyentarlas por una mala actitud nuestra”, concluyó.