Desde que comenzó la pandemia de Covid-19 en marzo de 2020, un total de 58 operadores de transporte público fallecieron por complicaciones por la enfermedad, de los cuales 49 fueron del servicio individual taxis, dos del sistema de Tuzobús y siete de unidades Urvans, de acuerdo con datos generales de la Secretaría de Movilidad y Transporte (Semot).
Los taxistas que fallecieron por complicaciones derivadas de Covid-19 presentaron factores de comorbilidad como hipertensión, obesidad, diabetes o tabaquismo, siendo el grupo de operadores más afectado, reconoció el presidente de la Federación de Unión de Trabajadores del Volante del Estado de Hidalgo (FUTV), Pedro Solares.
El representante de los taxistas explicó que más del 80 por ciento de los trabajadores del volante padecen diabetes, debido a los hábitos alimenticios que mantienen y el estilo de vida que llevan, por lo que fue uno de los grupos más vulnerables.
En las unidades Urvans fallecieron siete operadores del transporte público en los dos años de la pandemia, lo que representó menos del cinco por ciento del total de los trabajadores que operan en estas unidades de transporte público, confirmó el presidente de la Unión de Transportistas de Hidalgo, Oscar Monzalvo.
Asimismo, la Semot indicó que fallecieron dos de los 191 trabajadores que forman parte de la planilla del Tuzobús, lo que representó menos del tres por ciento de los operadores del servicio de transporte público metropolitano.
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Además, las autoridades estatal han señalado que los operadores de todas las modalidades de transporte público metropolitano deben continuar con las medidas de bioseguridad como el uso de cubrebocas, así como la sanitización de las unidades que están en circulación de forma permanente, sin embargo, se ha permitido el flujo de los vehículos al cien por ciento de su capacidad.
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