El líder de comerciantes de la Central de Abasto de Pachuca, Francisco Rodríguez Pérez, dio a conocer, ayer, que las ventas en el espacio comercial disminuyen en más de un 30 por ciento, durante los días jueves y viernes “santos”.
Incluso, dijo, muchos bodegueros cierran sus negocios y el lugar permanece casi solo.
“Este año la disminución de ventas ha sido mucho menor con respecto a los anteriores; hemos llegado a registrar hasta un 50 o 60 por ciento, en esta misma temporada”, indicó.
Atribuyó este descenso a la falta de interés de las familias, ya que dijo, están pensando en donde vacacionar en lugar de abastecer la despensa. “Hoy solamente compran lo indispensable; lo que no se echa a perder”, mencionó.
Explicó que los días en que las amas de casa acudían al lugar a surtir la despensa, tanto de verduras, frutas, cremería y abarrotes, ya casi han desaparecido.
“Sobre todo cuando se trata de vacaciones largas, como estas de Semana Santa o las de verano”, argumentó.
Lo peor de todo, dijo, es que la gente se queda sin dinero y los días posteriores serán todavía más complicados.
“No es exclusivo de la Central de Abasto. Es un problema generalizado en todos los mercados de Pachuca y de todos los municipios”, mencionó.
Lamentó que mucha gente se deja llevar por la inercia de las vacaciones y no planea sus gastos.
Expuso que van y se embarcan en balnearios y paseos, y dejan como asunto secundario su alimentación. Y lo hacen, dice, porque los pueden adquirir a crédito, en grandes cadenas comerciales, aunque no sean frescos. “Por eso terminan ahogando su economía”, enfatizó.
Finalmente, señaló que esperan que las ventas se recompongan a partir de la próxima quincena.