Gustavo Samperio, delegado de la Asociación Nacional de Comerciantes en Automóviles y Camiones Nuevos y Usados (ANCA) en la entidad, informó que la venta de automotores disminuyó considerablemente en los últimos tres meses, hasta en un 30 por ciento.

“No hay circulante”, dijo, y los pocos que se venden, se comercializan a crédito.

“La economía está parada. No hay efectivo. La realidad es que la gente no tiene dinero, y si tiene, lo gasta en lo indispensable”, mencionó.

Samperio explicó que la situación crea un problema económico grave para los inversionistas, pues al no existir ventas, se ven obligados a bajar de precio los coches, nuevos, seminuevos y de mayor uso.

“Si lo ofrecemos, en forma regular, en 80 mil pesos, tenemos que bajar el precio a 70, para no tenerlo tanto tiempo parado en exhibición”, mencionó.

Argumentó que como establecimientos fijos, que son los llamados lotes, se encuentran en desventaja frente a los comerciantes que ofrecen los automotores en tianguis.

Nosotros, dijo, nos conducimos bajo un esquema de control de calidad; es decir, no recibimos cualquier vehículo, hasta no estar bien revisado.

Sin embargo, reconoció que la variación de precios que existe frente a los vendedores de los tianguis, a veces es muy amplia.

“Se debe a que los coches que se ofrecen en los mercados no están en buenas condiciones, o bien, tienen detalles costosos de reparar, por eso son más baratos”, enfatizó.

Argumentó que, incluso, pocos son los que cuentan con seguro vehicular.

“Lo anterior, independientemente del riesgo que implica que el coche sea robado, lo que ocasionaría al comprador y vendedor un problema judicial y penal”, sostuvo.

Gustavo Samperio destacó que los lugares bien establecidos no solamente te dan facilidades, sino que también te ofrecen garantía.

Por eso, dijo, los precios son un poco más elevados.

“La ventaja, es que el cliente lleva todas las de ganar, tanto en documentos como en el estado físico de la unidad”, concluyó.