Si bien no hay incremento en el número de mujeres atendidas por motivos de violencia, la directora del Instituto Hidalguense de las Mujeres (IHM), María Concepción Hernández Aragón, reconoció que la pandemia por coronavirus que ha afectado y alterado las formas de convivencia laboral y familiar, y con ello se incrementan los factores de riesgo para sufrir violencia en el hogar.
Lo anterior, tras considerar que hay cambios que podrían incidir como, la economía, la falta de habilidad para expresar emociones, y el propio estrés que significa el aislamiento social.
También se suma la situación económica de las familias, la cual de acuerdo con la directora del IHM “afecta de manera diferente, quienes tienen un ingreso asegurado podrían sentir mayor tranquilidad que quienes trabajaban en la economía informal o de manera independiente, por la imposibilidad de operar de manera normal, lo cual reduce el ingreso para cubrir las necesidades básicas, ello altera el estado de ánimo de las personas, incrementa el estrés”.
Lo anterior – dijo – “se conjuga con prácticas machistas, en el caso de los hombres, de falta de habilidad para expresar o canalizar emociones de manera asertiva, lo que puede producir comportamientos agresivos, verbal, psicológica, hasta la física”.
En consecuencia, el aislamiento social implica mayor convivencia en el mismo espacio, por tiempos más prolongados, “aderezada con la preocupación y el estrés de los riesgos de salud, por la propia”.
María Concepción Hernández informó que, durante el primer trimestre de 2020, se habían ofrecido un total de 23 mil 382 servicios de atención a mujeres, siendo 6 mil 540 en enero, 8 mil 870 en febrero, y 7 mil 972 en marzo, siendo 50 por ciento, atenciones jurídicas y el resto se divide en psicológica y de trabajo social.
La titular del IHM solicitó a las mujeres que pudieran encontrarse en situación de violencia que pidan apoyo a las instituciones, sobre todo que recuerden el 911, ahí pueden llamar ante cualquier situación de riesgo, y de ahí serán canalizadas a la institución correspondiente.
Reiteró que las condiciones de aislamiento a la que obliga esta emergencia sanitaria, cuyas medidas contempladas en el Operativo Escudo que debemos acatar, no implican bajo ninguna circunstancia que se deban tolerar situaciones de violencia de ningún tipo, por lo que pidió a las familias y a la ciudadanía que en caso de percatarse de un riesgo para una mujer, una niña o cualquier otra persona, y que por las mismas condiciones no puedan denunciar, llamen al 911 o a los contactos ya referidos y en lo que respecta al IHM buscará la manera de acercar los servicios.
Lo importante, dijo, es no ser indiferente a esta problemática y asumir una responsabilidad social. “No debemos ser apáticas/os ni estar ausentes, cuando alguien esté en riesgo de violencia familiar”, enfatizó.
Finalmente, dejó claro que el instituto, a través de los Módulos, en este periodo de contingencia trabaja de manera permanente, respetando la indicación de la sana distancia, a través de guardias y con la ayuda de medios digitales y electrónicos, pero no ha dejado ni dejará sin atención a las mujeres.
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