Por una fuerte lesión en la rodilla que sufriera en el 2011, la gladiadora Viridiana Maldonado Castillo se alejó de la colchoneta en la cual se mantenía como una de las cartas fuertes de Hidalgo a nivel nacional en aquel entonces. Hoy, tras una dura rehabilitación está de regreso y quiere dejar huella de su trabajo.
“Se me rompió el ligamento cruzado anterior, tengo cinco tornillos, el ligamento no es mío, traigo una pierna robótica. Pensamos que no se iba a poder, pero el control de la mente…”.
La gladiadora quien en ese año (2011) se encontraba participando en la Olimpiada Nacional del 2011, recordó que 15 días antes de esa competencia se había sometido a una cirugía y que asistió a la “Blanca Mérida” con la rodilla hinchada y aún con puntos y fue durante un combate que ya no pudo más y se le notificó que si seguía, podía afectarse por completo su lesión, al grado de quizás ya no poder caminar, lo que le llevó a una depresión y a tomarse un largo receso.
Fue hasta hace cinco meses que la gladiadora regresó de lleno a los entrenamientos y hace un par de semanas que se presentó en su primera competencia, el primer Campeonato Selectivo Nacional ''Profesor Abel Hernández Cortés''.
“He estado en competencias fitness, pero la verdad me hace falta el golpe, el contacto y la lucha, el fitness me gusta, me mantiene, me siento fuerte, pero lucha es mi pasión. Siempre he estado determinada en lograr un buen nivel para México”.
Dijo que este es un ciclo olímpico que está por terminar pues el siguiente año los mejores atletas del mundo se darán cita en Tokyo, “quiero retomar mi nivel competitivo, seguir poco a poco, encabezar la categoría. Es complicado, pero no hay imposibles, no hay rivales ni fáciles ni invencibles”.