Plata en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018, oro en el Grand Prix de Cancún, plata y bronce en Panamericano de Judo y oro en un Abierto Panamericano, son algunos de los logros que ha tenido la judoka Luz María Olvera Suárez, después de ser madre.

Previo a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro la atleta hidalguense vivía su primer proceso olímpico, mismo que tuvo que ser interrumpido por el embarazo de quien hoy lleva por nombre Ian.

Posterior a ello, Olvera Suárez se hizo el propósito de regresar a su nivel y así reincorporarse a la selección nacional de la especialidad y así fue, poco a poco volvió a convertirse en una de las mejores exponentes de su categoría (-52 kilogramos), “cuando regrese del embarazo los primeros meses fueron vitales para regresar a mi condición y la división en la que competía.”

En entrevista con El Sol de Hidalgo, Luz comentó: mis entrenamientos antes de ser mamá y después, son exactamente igual realmente no cambio nada seguimos con la misma intensidad.”

Agregó que “el estar tanto tiempo lejos de él, el no convivir como yo quisiera el perderme de algunas cosas, es bastante complicado pero, a la vez se que le estoy enseñando a cumplir sus objetivos, a no darse por vencido y que si él quiere pude lograr lo que el deseé, pero también es una lucha interna al saber que algún día me reclamará por no estar con él.”

Hoy en día, el pequeño Ian sigue los pasos de su madre, “qué te puedo decir, el entrena judo, lo trae en la sangre, es un niño que camino y creció en el tatami, es un niño excepcional y yo lo apoyo en lo que le gusta hacer ya sea judo, fútbol o natación.”