/ domingo 9 de agosto de 2020

Más recomendaciones de música académica

Para terminar con mis recomendaciones de música académica, no quiero dejar de mencionar las siguientes que forman parte de la gran variedad universal de este tipo de música. Imposible no hablar de Carmina Burana, (Kármina Burana) una obra compuesta por el músico alemán Karl Orf, con letra de unos versos profanos que hablan de amores y de placeres, de fortuna y de apetitos humanos, de vino y de desórdenes; fueron encontrados por los alemanes en un monasterio y el régimen de Hitler quiso convertirla en la música oficial del Tercer Reich, afortunadamente como todo lo de estos equivocados, no prosperó, pero la música que tiene un valor permanente prevaleció y ahora ya nadie recuerda al oírla la intención nazi de ligarla a sus extraviadas doctrinas racistas y desmedido poder. En uno de los versos de esta parte de la obra conocido como Oh Fortuna dice en latín:

“O Fortuna/ velut luna,/statu variabilis/ semper crescis/ aut decrescis vita detestabilis/ nunc obdurat/ et tunc curat/ ludo mentis aciem, egestatem,/ potestatem/ dissolvit ut glaciem.” Que en español quiere decir:

Oh Fortuna,/como la Luna variable de estado,/ siempre creces/ o decreces; Vida detestable/ ahora oprime /después alivia/ como un juego,/ a la pobreza y al poder/derrites como al hielo. Esta música es extraordinaria, muy determinante y contundente, tiene un ritmo admirable.

Del músico ruso Aram Khachaturian recomiendo que escuchen su concierto para violín y su concierto para chelo, son obras muy atractivas. También ruso, el gran Dimitri Shostakovich, quien compuso el famoso Vals Núm. 2 y, como salió en la película de El Padrino III, muchos le mal llaman el Vals del Padrino.

Es muy hermoso. Y para no olvidar a otro gran ruso mencionamos el concierto para piano de Sergei Prokofiev que es delicioso. Muy conocido el concierto para piano Núm. 1 del otro Sergei, de Rachmaninov. Rusia ha dado al mundo muchas obras a través de sus compositores, sobre todo en el siglo XIX y parte del XX. Otro músico muy destacado es el noruego Edvard Grieg, quien tiene su hermoso concierto para piano Núm. 1 y que es considerado como clásico de la música escandinava, junto con su obra Peer Gynt que es maravillosa.

Así como La Mañana, del mismo autor, que junto con En la Árida Montaña forman parte del repertorio que usted no puede dejar de oir y disfrutar, de Edvard Grieg. De Franz Schubert, escuche la famosa Sinfonía Inconclusa, llamada así porque no la terminó y nadie sabe el por qué.

También su obra Rosamunda es muy bella. Schubert fue un gran admirador de Beethoven y antes de morir a los 31 años de edad, pidió ser enterrado junto a él. Recomiendo también que escuchen del compositor Franz Von Suppé la obra Poeta y Campesino que es muy agradable y tiene significado, ya que evoca lo rural y la poesía, que se da en cualquier ambiente.

De Richard Wagner escuche usted la obra Tannhauser, es sublime como toda la creación Wagneriana.

Para terminar con mis recomendaciones de música académica, no quiero dejar de mencionar las siguientes que forman parte de la gran variedad universal de este tipo de música. Imposible no hablar de Carmina Burana, (Kármina Burana) una obra compuesta por el músico alemán Karl Orf, con letra de unos versos profanos que hablan de amores y de placeres, de fortuna y de apetitos humanos, de vino y de desórdenes; fueron encontrados por los alemanes en un monasterio y el régimen de Hitler quiso convertirla en la música oficial del Tercer Reich, afortunadamente como todo lo de estos equivocados, no prosperó, pero la música que tiene un valor permanente prevaleció y ahora ya nadie recuerda al oírla la intención nazi de ligarla a sus extraviadas doctrinas racistas y desmedido poder. En uno de los versos de esta parte de la obra conocido como Oh Fortuna dice en latín:

“O Fortuna/ velut luna,/statu variabilis/ semper crescis/ aut decrescis vita detestabilis/ nunc obdurat/ et tunc curat/ ludo mentis aciem, egestatem,/ potestatem/ dissolvit ut glaciem.” Que en español quiere decir:

Oh Fortuna,/como la Luna variable de estado,/ siempre creces/ o decreces; Vida detestable/ ahora oprime /después alivia/ como un juego,/ a la pobreza y al poder/derrites como al hielo. Esta música es extraordinaria, muy determinante y contundente, tiene un ritmo admirable.

Del músico ruso Aram Khachaturian recomiendo que escuchen su concierto para violín y su concierto para chelo, son obras muy atractivas. También ruso, el gran Dimitri Shostakovich, quien compuso el famoso Vals Núm. 2 y, como salió en la película de El Padrino III, muchos le mal llaman el Vals del Padrino.

Es muy hermoso. Y para no olvidar a otro gran ruso mencionamos el concierto para piano de Sergei Prokofiev que es delicioso. Muy conocido el concierto para piano Núm. 1 del otro Sergei, de Rachmaninov. Rusia ha dado al mundo muchas obras a través de sus compositores, sobre todo en el siglo XIX y parte del XX. Otro músico muy destacado es el noruego Edvard Grieg, quien tiene su hermoso concierto para piano Núm. 1 y que es considerado como clásico de la música escandinava, junto con su obra Peer Gynt que es maravillosa.

Así como La Mañana, del mismo autor, que junto con En la Árida Montaña forman parte del repertorio que usted no puede dejar de oir y disfrutar, de Edvard Grieg. De Franz Schubert, escuche la famosa Sinfonía Inconclusa, llamada así porque no la terminó y nadie sabe el por qué.

También su obra Rosamunda es muy bella. Schubert fue un gran admirador de Beethoven y antes de morir a los 31 años de edad, pidió ser enterrado junto a él. Recomiendo también que escuchen del compositor Franz Von Suppé la obra Poeta y Campesino que es muy agradable y tiene significado, ya que evoca lo rural y la poesía, que se da en cualquier ambiente.

De Richard Wagner escuche usted la obra Tannhauser, es sublime como toda la creación Wagneriana.