/ domingo 14 de febrero de 2021

Lo asombroso de Alfonso Cravioto

Como lo decía en mi pasada colaboración voy a comentar la segunda parte de los asombrosos pasos de la vida del Constituyente de Pachuca.

Después del golpe de Estado y el asesinato de Francisco I Madero y Pino Suárez y estando señalado Cravioto por huerta y sus esbirros como amigo de Madero y enemigo de los generalotes de la Decena Trágica, Alfonso siguiendo sus ideales revolucionarios se incorporó con Carranza a la lucha por derrocar a victoriano huerta y estuvo ahí hasta el derrocamiento del chacal. Lo sobresaliente de esa época es que cuando asesinaron a Jesús Carranza los enemigos del primer Jefe, éste, en el sepelio en Veracruz, le encargó a Cravioto la oración fúnebre en el panteón al sepultar al hermano caído.

Entró con Don Venustiano a Cd. de México para participar en el Gobierno Revolucionario y estuvo en la Secretaría de Instrucción Pública con Félix Palavicini. Inmediatamente después se convocó al Congreso Constituyente para hacer una nueva Constitución y Cravioto de 32 años de edad, fue electo Diputado Constituyente por Pachuca y así estuvo en el Congreso de Querétaro donde se elaboró la Constitución. El defendió la postura de los llamados diputados del Bloque Renovador. Los diputados constituyentes aprobaron sus credenciales y la de los otros compañeros diputados del bloque maderista de la famosa XVI legislatura. Cravioto explicó que todo se hizo de acuerdo a las instrucciones del Sr. Carranza, que a la muerte de Madero asumió de facto la Jefatura del movimiento revolucionario.

En el Constituyente Cravioto fue de los más activos. Participó decididamente en la elaboración del artículo tercero sobre la Educación, del 123 sobre el trabajo y otros muy importantes. Al término del Constituyente, fue a ocupar su lugar a la subsecretaría de Instrucción Pública. Después volvió a ser legislador, ahora Senador por el Estado de Hidalgo y en esta representación pugnó por la creación de la secretaría de Educación Pública.

En esa época pronunció en el Senado uno de los Discursos más brillantes de su vida, ante las delegaciones de muchos países que habían venido a la conmemoración de los 100 años de la Consumación de la Independencia en 1921.

En el México posrevolucionario de los cañonazos de 50,000 pesos, los asesinatos políticos por causa de candidaturas, las traiciones y los acuerdos por debajo del agua, no cabía el noble espíritu de Don Alfonso y su verticalidad inquebrantable, así que el sistema, que quería manifestar su mejor imagen al mundo optó por nombrarlo Embajador para mostrar al mundo la calidad de hombres que tenía México aparte de los políticos ladrones y matones. Fue embajador en varios países de Suramérica y de Europa. Dondequiera que estuvo fue condecorado y reconocido.

Así terminó su vida política y se dedicó en sus misiones diplomáticas a escribir y representar a México con gran dignidad y calidad humana.

Murió siendo Senador en 1955 a los 71 años de edad.

Como lo decía en mi pasada colaboración voy a comentar la segunda parte de los asombrosos pasos de la vida del Constituyente de Pachuca.

Después del golpe de Estado y el asesinato de Francisco I Madero y Pino Suárez y estando señalado Cravioto por huerta y sus esbirros como amigo de Madero y enemigo de los generalotes de la Decena Trágica, Alfonso siguiendo sus ideales revolucionarios se incorporó con Carranza a la lucha por derrocar a victoriano huerta y estuvo ahí hasta el derrocamiento del chacal. Lo sobresaliente de esa época es que cuando asesinaron a Jesús Carranza los enemigos del primer Jefe, éste, en el sepelio en Veracruz, le encargó a Cravioto la oración fúnebre en el panteón al sepultar al hermano caído.

Entró con Don Venustiano a Cd. de México para participar en el Gobierno Revolucionario y estuvo en la Secretaría de Instrucción Pública con Félix Palavicini. Inmediatamente después se convocó al Congreso Constituyente para hacer una nueva Constitución y Cravioto de 32 años de edad, fue electo Diputado Constituyente por Pachuca y así estuvo en el Congreso de Querétaro donde se elaboró la Constitución. El defendió la postura de los llamados diputados del Bloque Renovador. Los diputados constituyentes aprobaron sus credenciales y la de los otros compañeros diputados del bloque maderista de la famosa XVI legislatura. Cravioto explicó que todo se hizo de acuerdo a las instrucciones del Sr. Carranza, que a la muerte de Madero asumió de facto la Jefatura del movimiento revolucionario.

En el Constituyente Cravioto fue de los más activos. Participó decididamente en la elaboración del artículo tercero sobre la Educación, del 123 sobre el trabajo y otros muy importantes. Al término del Constituyente, fue a ocupar su lugar a la subsecretaría de Instrucción Pública. Después volvió a ser legislador, ahora Senador por el Estado de Hidalgo y en esta representación pugnó por la creación de la secretaría de Educación Pública.

En esa época pronunció en el Senado uno de los Discursos más brillantes de su vida, ante las delegaciones de muchos países que habían venido a la conmemoración de los 100 años de la Consumación de la Independencia en 1921.

En el México posrevolucionario de los cañonazos de 50,000 pesos, los asesinatos políticos por causa de candidaturas, las traiciones y los acuerdos por debajo del agua, no cabía el noble espíritu de Don Alfonso y su verticalidad inquebrantable, así que el sistema, que quería manifestar su mejor imagen al mundo optó por nombrarlo Embajador para mostrar al mundo la calidad de hombres que tenía México aparte de los políticos ladrones y matones. Fue embajador en varios países de Suramérica y de Europa. Dondequiera que estuvo fue condecorado y reconocido.

Así terminó su vida política y se dedicó en sus misiones diplomáticas a escribir y representar a México con gran dignidad y calidad humana.

Murió siendo Senador en 1955 a los 71 años de edad.