/ domingo 15 de mayo de 2022

La parroquia de La Asunción en el Centro Histórico

La Iglesia de La Asunción es la más antigua de Pachuca, es anterior a la de San Francisco. A mediados del siglo XVI en 1553, se inició su construcción; fue hecha de adobe y su cubierta fue de tejamanil, sin embargo ostentaba una torre hecha de cal y canto. Esta iglesia era a la que asistían los fieles y los mineros en los primeros años de la evangelización en Pachuca.

Permaneció el edificio cerca de 100 años hasta que a mediados del siglo XVII en 1647, fue derribada para levantarse en su lugar un templo bien cimentado, de piedra, con anchos muros y bóvedas de piedra, con una gran bóveda semiesférica en el crucero y un alto campanario de piedra también.

Esta es la edificación que hasta ahora existe y fue terminada en 1712, por lo que tiene más de trescientos años en funcionamiento; en el año 2012 recordamos su tercer centenario. El campanario principal ha sufrido varias reformas, sobre todo en sus dimensiones y en su aspecto formal. También su fachada, ya que en su parte superior tuvo un remate con reloj público que fue retirado a principios del siglo XX.

Muchas ceremonias se realizaron en esta iglesia que en tal época, el templo del convento de San Francisco parecía estar lejos pues se encontraba en las afueras de la ciudad. Una calle, que fue muy importante para la ciudad en esos tiempos es la llamada ahora de Hidalgo, que unía a los dos templos, el de la parroquia de La Asunción y el del Convento Franciscano. Esta iglesia, en la Plaza Constitución, tenía su atrio hacia el poniente ya que estaba orientada en la forma litúrgica, el altar hacia el oriente y la puerta de acceso al oeste. El atrio estuvo muchos años cercado con reja y columnas rematadas por almenas y daba desde la Plaza Constitución hasta el edificio de Las Cajas.

En los años posteriores a la nacionalización de los bienes del clero decretada por las leyes de Reforma, sufrió una invasión que recortó su atrio y encimó sobre la capilla lateral y su campanario al lado norte, una franja de construcciones que hasta ahora permanece. La reja del atrio fue retirada a principios del siglo XX quedando al descubierto y expuesta al comercio ambulante. Hay un proyecto para devolverle su dignidad atrial. Ahora el atrio es un desastre, está invadido por comercio ambulante, por personas que hacen del atrio su refugio, gente sin trabajo y sin destino que se la pasan al rayo del sol. Esto ofrece un aspecto denigrante de nula calidad urbana.

Un grupo de personas y el Párroco Francisco López, estamos planteando recuperar el Atrio como se hizo en la parroquia de San Francisco. El que esto escribe hizo un proyecto, ya aprobado por el INAH y hasta un presupuesto para realizar dicha obra de mejora urbana. Estamos en manos de la autoridad municipal, que deberá dar su permiso y apoyo. Esperamos que autorice el rescate de este importante espacio para Pachuca.

La Iglesia de La Asunción es la más antigua de Pachuca, es anterior a la de San Francisco. A mediados del siglo XVI en 1553, se inició su construcción; fue hecha de adobe y su cubierta fue de tejamanil, sin embargo ostentaba una torre hecha de cal y canto. Esta iglesia era a la que asistían los fieles y los mineros en los primeros años de la evangelización en Pachuca.

Permaneció el edificio cerca de 100 años hasta que a mediados del siglo XVII en 1647, fue derribada para levantarse en su lugar un templo bien cimentado, de piedra, con anchos muros y bóvedas de piedra, con una gran bóveda semiesférica en el crucero y un alto campanario de piedra también.

Esta es la edificación que hasta ahora existe y fue terminada en 1712, por lo que tiene más de trescientos años en funcionamiento; en el año 2012 recordamos su tercer centenario. El campanario principal ha sufrido varias reformas, sobre todo en sus dimensiones y en su aspecto formal. También su fachada, ya que en su parte superior tuvo un remate con reloj público que fue retirado a principios del siglo XX.

Muchas ceremonias se realizaron en esta iglesia que en tal época, el templo del convento de San Francisco parecía estar lejos pues se encontraba en las afueras de la ciudad. Una calle, que fue muy importante para la ciudad en esos tiempos es la llamada ahora de Hidalgo, que unía a los dos templos, el de la parroquia de La Asunción y el del Convento Franciscano. Esta iglesia, en la Plaza Constitución, tenía su atrio hacia el poniente ya que estaba orientada en la forma litúrgica, el altar hacia el oriente y la puerta de acceso al oeste. El atrio estuvo muchos años cercado con reja y columnas rematadas por almenas y daba desde la Plaza Constitución hasta el edificio de Las Cajas.

En los años posteriores a la nacionalización de los bienes del clero decretada por las leyes de Reforma, sufrió una invasión que recortó su atrio y encimó sobre la capilla lateral y su campanario al lado norte, una franja de construcciones que hasta ahora permanece. La reja del atrio fue retirada a principios del siglo XX quedando al descubierto y expuesta al comercio ambulante. Hay un proyecto para devolverle su dignidad atrial. Ahora el atrio es un desastre, está invadido por comercio ambulante, por personas que hacen del atrio su refugio, gente sin trabajo y sin destino que se la pasan al rayo del sol. Esto ofrece un aspecto denigrante de nula calidad urbana.

Un grupo de personas y el Párroco Francisco López, estamos planteando recuperar el Atrio como se hizo en la parroquia de San Francisco. El que esto escribe hizo un proyecto, ya aprobado por el INAH y hasta un presupuesto para realizar dicha obra de mejora urbana. Estamos en manos de la autoridad municipal, que deberá dar su permiso y apoyo. Esperamos que autorice el rescate de este importante espacio para Pachuca.