ACERVO
Pasamos ya las fiestas navideñas y estamos en la víspera de fin de año para recibir este sábado al primer día del 2022; un año que supondrá retos muy importantes dentro de la agenda social de México y de Hidalgo y que sin duda esperamos deseosos en cada hogar a lo largo del territorio nacional y estatal. Continuando con el balance 2021 para Hidalgo en esta segunda entrega, quiero exponer de cara al lector la continuación del clima de inversiones que se presentó sistemáticamente en el Estado. Fue así que para una entidad como la nuestra, en donde se le ha apostado al desarrollo económico regional, el poder consolidar agendas de atracción de capitales aún en una coyuntura de alta complejidad como lo ha sido la de la pandemia sanitaria, es un motivo natural de certidumbre social para muchos municipios que hoy se encuentran accionando los diferentes calendarios de edificación de estos grandes proyectos anunciados, sumando casi por igual a importantes números de capital humano a través de mano de obra local altamente calificada. Así, de forma directa se pueden comenzar a perfilar mejoras en los índices de calidad de vida de miles de hidalguenses que hoy cuentan de entrada, con una garantía de seguridad social ante el IMSS, de acceso a fondos de vivienda a través del INFONAVIT, de contratos laborales signados al amparo del cuidado de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, pasando por fuertes inversiones en materia de salud, educación y seguridad, por citar tres rubros de la administración, orientados todos para dotar de mejores servicios hacia los hidalguenses. Continúan sin duda asignaturas pendientes según cada particularidad en un determinado municipio o colonia, pero es muy importante situar que sí se ha constatado una movilidad económica local, aún dentro del clima de contracción mundial e inflación nacional.
Para lograr estas consideraciones, es innegable la certidumbre institucional y de buen gobierno que se ha tenido en Hidalgo.
Así, dentro de los tres niveles de gobierno podremos encontrar canales de comunicación abiertos que han sido por demás efectivos a la hora de anunciar una inversión para un punto geográfico en lo particular. En este sentido, el trabajo y oficio político del gobernador Omar Fayad para construir acuerdos en un primer momento con los inversionistas, lo mismo nacionales como extranjeros, quienes son a final de cuentas los generadores de las fuentes de empleo en favor de las y los hidalguenses, desde el momento mismo de la ejecución de obras constructivas de los conjuntos inmobiliarios hasta llegada la operación una planta, fábrica o de un centro de distribución y por el otro lado en una segunda fase, el establecimiento de puentes de coordinación eficaces con la federación y los gobiernos municipales, para que desde su pluralidad política se puedan convenir intereses que posibiliten dar certidumbre a la iniciativa privada de que sí se puede invertir en este momento en Hidalgo con prácticamente todas las garantías de éxito empresarial.
El 2021 deja a un Hidalgo que se encuentra accionando proyectos de infraestructura de alto impacto y que a lo largo del tránsito del 2022 podremos ver su consolidación, partiendo de la premisa de que nos debe de ir bien a todas y a todos sus habitantes. La certeza institucional, el respeto al Estado de derecho, la vigilancia epidemiológica, la atracción de inversiones, el impulso al emprendedurismo, la apuesta a la reactivación del turismo, el combate a la corrupción, el control de la seguridad pública, la accesibilidad a la procuración de justicia, el impulso al campo, la apuesta a la educación, entre otros elementos del desarrollo social son nuestro balance hacia la conclusión del 2021. Que el 2022 sea para sus ciudadanos y habitantes un año en donde tengamos salud, que todos tengamos oportunidades para crecer e invertir, que tengamos alegrías, éxitos y prosperidad. Que sea propicio para consolidar los sueños de todas y todos! Muchas felicidades!
