NECESARIO QUE LOS NIÑOS SE INTERESEN POR LA LECTURA
En la segunda quincena del mes de junio, a partir de hoy, la XIX Feria del Libro Infantil y Juvenil estará en 30 municipios de la entidad. Un avance significativo en la búsqueda de acercar la lectura a más personas con el objeto de que se incremente el interés por ella.
La lectura contribuye a formar mejores ciudadanos y en consecuencia, mejores pueblos. Por ello, es valioso que los gobiernos se ocupen de fomentarla.
Especialmente cuando México no es un país donde la gente lea mucho. Basta con citar el resultado de una encuesta que el INEGI realizó en febrero del presente año.
El 45 por ciento de los mexicanos leen al menos un libro al año, pero el otro 55 por ciento no lee.
Y de los que sí leen casi la mitad de ellos se sienten atraídos por cuentos y novelas, un 30 por ciento recurre a textos de autoayuda.
Además de ello, la encuesta reveló que el 64 por ciento de las personas no les lee a sus hijos y el 70 por ciento no se preocupa por fomentar que sus niños y adolescentes visiten las bibliotecas o librerías.
En otro tema, muchas voces se han hecho escuchar voces en defensa de los artesanos mexicanos, específicamente de quienes elaboran los famosos tenangos.
Es un acierto que autoridades federales y estatales, en materia de cultura, así como el alcalde de Tenango de Doria, intervengan y defiendan los derechos de las personas que generación tras generación dedican horas, días e incluso semanas para crear sus coloridos diseños.
Nunca es tarde para ayudar a todas las familias que viven de esa actividad.
Y qué bueno que se ponga en evidencia que marcas nacionales e internacionales se piratean esos diseños que, sin duda, les dejan buenos dividendos económicos al venderlos a precios que los artesanos nunca habrían imaginado.
Sin embargo, hay un punto en el que nuestras autoridades deben trabajar: los intermediarios.
Así es, lamentablemente en el tema artesanal, igual que en el de los alimentos, existen los intermediarios, quienes por cierto se quedan con las mejores ganancias.
Para ayudar a los artesanos es fundamental protegerlos, blindarlos de los abusos de quienes compran barato y venden caro.
Por eso, hay que reconocer el esfuerzo de la Secretaría de Cultura de Hidalgo al abrir tiendas de artesanías en distintas regiones de la entidad, que permiten la comercialización de los productos de los artesanos hidalguenses, de tal forma que el beneficio económico sea para ellos.
Habrá que ver si los congresistas locales y federales impulsan alguna propuesta para que los tenangos sean un patrimonio de los hidalguenses.