DE FRENTE A LA CIUDADANÍA
Para esta entrega deseo reflexionar con ustedes sobre una notica que ha impactado al mundo y que ojalá nos lleve del shock a la acción.
El pasado mes de mayo en Nairobi fue presentado durante la Cuarta Asamblea del Programa de Medio Ambiente de Naciones Unidas (PNUMA), el nuevo informe sobre el estado del medio ambiente; un documento de más de 700 páginas con perspectivas bastante serias y aterradoras sobre nuestro futuro, ya que prevén el final de la vida como la conocemos.
Algunas de las advertencias de mayor gravedad e impacto, es que se pronostica el deshielo del Polo Norte, rompiendo el equilibrio ecológico que conocemos; esto afectará al resto del planeta, ya que de ser así, sufriríamos un aumento de hasta 5 grados centígrados en dicha región, lo que traerá un desequilibrio para el planeta.
A lo anterior, se suma un aumento en el número de muertes por la mala calidad del aire y su contaminación. Se prevé que la primera causa de muerte en el mundo será por la resistencia a los antibióticos, provocada por los contaminantes del ambiente. Como podemos ver el año 2050 pareciera ser la fecha de caducidad del planeta, situación que me parece realmente grave, soy padre de familia y para esa fecha mis hijos apenas estarán llegando aproximadamente a la edad que hoy tengo; me aterra la idea de pensar que además de los problemas normales que uno enfrenta en la vida, ellos tengan que mirar de frente a la extinción y ya ni siquiera me atrevería a hablar de lo que tendrían que enfrentar sus hijos.
Es bastante injusto que les heredemos esos problemas, por eso es momento de pasar de los buenos deseos a las acciones concretas.
La ONU también nos ha dado una posible solución, debemos reducir de manera contundente la emisión de gases tóxicos que emiten los vehículos, las industrias y las calefacciones, mismos que van a parar a la atmósfera.
Debemos obligar a nuestros gobiernos a cumplir con el Acuerdo de París contra el cambio climático, además de practicar los requerimientos del informe en cuestión que nos llevarían a reducir un 40% en el año 2020 y un 70% en 2050 para así frenar el aumento de la temperatura de la Tierra en 2 grados centígrados, cifra ya establecida previamente en el Acuerdo de París y como ciudadanos tomemos acciones concretas a favor del planeta.
Nuestras futuras generaciones se lo merecen, no podemos fallar.
